Verano,majestuoso momento del año, en el que dejas de preocuparte por los estudios, y puedes disfrutar de la tranquilidad de no acogerte a prejuicios, conocer nueva gente que no te juzgará por lo que digan o por lo que hayas sido, sino por lo que eres. Así comienza la historia de un joven chico de una gran ciudad, llamado Alberto, un chico estudioso pero no por ello menos ''enrollado'', era el ultimo día de clase, sólo tendría que soportar unas míseras horas mas para no tener que volver a esa ''cárcel'' llamada instituto y poder olvidarse de los estudios por un tiempo, dejaría atrás a todos los que no le aceptan por, lo que el piensa que es envidia por sacar mejores resultados, o por no ser políticamente muy guapo, aunque no se metían con todos los que no lo eran, solo con él, pero este verano sería diferente, sus padres le habían anunciado que estas vacaciones las pasarían con sus tíos en la costa, mas concretamente en Benidorm, una gran ciudad, con hermosas playas, y repleta de gente en verano. Era 24 de Junio, cerca del mediodía, y al bajar del coche le estaban esperando Lucas y Raquel, sus tíos, y su prima Nerea, que tenia su misma edad, y que aunque siempre iba un poco retocada, tenia que admitir que era una chica muy guapa. Tras deshacer las maletas en su nuevo hogar durante los próximos dos meses, bajaron a comer, no comieron todos juntos, primero comieron Nerea y Alberto, y luego sus padres, durante la comida, Nerea y Alberto tuvieron una entretenida conversacion, en la que acordaron que hacer este verano, y mas concretamente, este mismo día. Irian a la playa y mas tarde, por la noche, saldrían de fiesta para que Alberto conociera a los que serían, su grupo de verano, bueno, el suyo y el de su prima. Después de la comida, partieron rumbo a la playa de levante, una de las mas grandes playas de Benidorm, allí les esperaba Laura, la mejor amiga de Nerea, que era una chica no muy alta, pelo castaño tirando a rubio, unos ojos marrones, pero no bonitos, tenia una nariz, que despuntaba en la cara, y una pequeña boca que no parecía corresponder a esa cara,digamos que no era la mismisima Afrodita. Después de estar un tiempo en la playa, Alberto se dio cuenta de que Laura se comportaba de manera un poco extraña hacia él, no dejaba de mirarle, y le acribillaba a preguntas, que aveces resultaban incomodas, así que fue a preguntarle a su prima.
-Nerea,¿puedes venir un momento?, le dijo Alberto a su prima, cortando la conversación que esta tenia con su amiga.
-Voi, espera un momento Laura, ahora vuelvo, dijo Nerea, que se levanto y se acerco hacia su primo.-¿Que quieres?
-Me estaba preguntando, ¿Hay alguna razón por la que Laura se comporte de esa manera respecto a mi?- dijo de manera tímida Alberto.
- Le gustas, me lo ha dicho, te encuentra atractivo-dijo rápidamente Nerea, y luego añadió en tono despectivo -No se que ve en ti.
-Pues no pienso igual respecto a ella, y no se que hacer para decírselo, podría decírselo esta noche cuando salgamos, ¿ella viene?-preguntó Alberto, que luego añadio-y por cierto, yo también te quiero prima, gracias por el halago.
-Si, pero no solo ella, esta noche vendrán muchos amigos, Luis a propuesto su casa para hacer una fiesta, ya que sus padres no van a estar durante toda la semana-dijo Nerea con una sonrisa en su cara.
Eran las 7 de la tarde, y los dos primos se despedían de Laura para volver a casa, en la mente de Alberto solo rondaba una cosa, como decirle a Laura, que el no siente lo mismo sin herirla, nunca había tenido que hacer eso, puesto que no solía gustarle mucho a las chicas, y temía que tuviera problemas con ella por su forma de decírselo, por su cabeza rondaban muchas maneras de decírselo, pero ninguna le convencía, las encontraba demasiado convencionales, frases como: -lo siento, pero no eres mi tipo, o, -eres encantadora, pero yo no quiero pasar la raya de ser amigos. Ninguna frase le convencía, pero tenia 3 horas para pensar en la frase correcta, este iba a ser el principio de un verano en el que cambiaría su vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario